Duynparc Soest
Ver más de cerca
Recreación regia de alto nivel...
...con las dunas de Soester como patio trasero y el Bosbad y el Dierenpark Amersfoort a la vuelta de la esquina.
También merece la pena visitar alguno de los numerosos mercados o festivales del centro histórico de Amersfoort, todo ello a poca distancia de nuestro hermoso parque. ¿Le gusta caminar y montar en bicicleta? En ese caso, también hay muchas posibilidades en las inmediaciones.
Disponemos de parcelas soleadas muy amplias y bien cuidadas con todas las instalaciones modernas. En nuestro parque encontrará una pista de tenis, una barbacoa cubierta, un cobertizo para bicicletas con instalaciones de carga para bicicletas eléctricas, una piscina, un parque infantil y mucho más.
Puede venir con tienda, caravana o autocaravana.
Para los excursionistas, tenemos tres cabañas.
Y, por supuesto, también puede alquilar un cómodo chalet.
Recreación regia de alto nivel...
...con las dunas de Soester como patio trasero y el Bosbad y el Dierenpark Amersfoort a la vuelta de la esquina.
También merece la pena visitar alguno de los numerosos mercados o festivales del centro histórico de Amersfoort, todo ello a poca distancia de nuestro hermoso parque. ¿Le gusta caminar y montar en bicicleta? En ese caso, también hay muchas posibilidades en las inmediaciones.
Disponemos de parcelas soleadas muy amplias y bien cuidadas con todas las instalaciones modernas. En nuestro parque encontrará una pista de tenis, una barbacoa cubierta, un cobertizo para bicicletas con instalaciones de carga para bicicletas eléctricas, una piscina, un parque infantil y mucho más.
Puede venir con tienda, caravana o autocaravana.
Para los excursionistas, tenemos tres cabañas.
Y, por supuesto, también puede reservar un confortable chalet o alquilar una lujosa y comodísima casa de campo o villa: ¡se trata de una auténtica estancia real!
Mira: eso es Duynparc Soest
El Duynhuys es nuestro restaurante, donde podrá tomar panecillos recién horneados por la mañana, cenar deliciosamente por la noche o simplemente acurrucarse junto a la chimenea con una buena copa de vino, ver la televisión, jugar al billar o simplemente jugar a las cartas juntos, y el precio de los refrescos tampoco le decepcionará. Por supuesto, tampoco falta el snack bar.
Nos vemos en el parque donde Gastvijheid sigue significando mucho: ¡Duynparc Soest!