Introdans revisita el monumental espectáculo de danza Typhoon (1986) de la coreógrafa Krisztina De Châtel.

Un prólogo sin viento va acompañado de ondulantes sonidos de piano del Canto Ostinato de Simeon ten Holt. A continuación, el rugido de las máquinas de viento ahoga los suaves sonidos del piano. Los bailarines están listos para la batalla, aspirando a pleno pulmón y luchando con orgullo contra esta materia (invisible) que hacen tangible mientras bailan. La coreógrafa Krisztina de Châtel consigue cautivar una y otra vez con su danza única y enérgica, llena de movimientos minimalistas y matemáticos.

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